Un proyecto vibrante que combina diseño gráfico y comunicación digital con una estética audaz, tipografía experimental y colorimetría impactante. En colaboración con el equipo de EMC Branding desarrollé piezas visuales para su identidad y redes sociales, incluyendo elementos editoriales, mockups digitales y materiales impresos.

El uso de tipografías deformadas, colores neón y collages digitales responde al enfoque joven y disruptivo de la marca. El universo visual se complementa con la web de EMC, donde se refuerza la filosofía directa y sin rodeos del estudio: hacer branding sin promesas vacías, con diseños que comunican y conectan.

Una experiencia creativa que me permitió trabajar conceptos contemporáneos y atrevidos, explorando el diseño desde el impacto visual hasta el discurso de marca.